María Teresa se despierta todos los días, a la misma hora. Ella va al baño, prepara el desayuno, se cepilla los dientes, toma una ducha y dedica el resto del día a sus quehaceres cotidianos. En el transcurso de todos sus días, todas las semanas, todos los años, María Teresa hace básicamente lo mismo: usar el baño, cocinar y limpiar. En su casa, lugares donde ha estudiado y trabajado, ella siempre ha tenido agua potable, con algunos cortes del servicio ocasionales y nunca se ha enfermado a causa del agua.

María Teresa vive todos los días absorbida por su rutina, con éxitos y fracasos, con momentos de gozo y con problemas. Como todos los seres humanos en el planeta. Tal vez María Teresa pocas veces o nunca ha pensado cómo sería su vida si el agua no estuviera disponible 24/7 o si llegara sucia o contaminada que pudiera enfermarla a ella o a su familia.

Si ustedes se identifican con la vida de María Teresa, en esta y las próximas publicaciones de este blog les contaremos cómo el agua que captamos de una fuente llega hasta sus casas continaumete, limpia y segura. La respuesta es un secreto que está literalmente escondido bajo nuestros pies.

Para que puedas tomar agua que no te enferme, muchas cosas deben pasar entre el río y la llave de tu casa . Lamentablemente, la contaminación de los ríos no nos permite tomar agua directamente de ellos. Por esto, el agua debe ser tratada para eliminar sustancias que puedan dañar nuestra salud. Si quieres leer más sobre ríos y abastecimiento de agua, lee nuestras publicaciones anteriores aquí (Parte I y Parte II).

Los sistemas de abastecimiento de agua potable se componen de las fuentes como ríos, lagos, acuíferos, mares; plantas de potabilización; redes de distribución y los usuarios finales (ver Figura 1). Estos últimos representan las tuberías, tanques y accesorios que hay dentro de tu unidad residencial, edificio, colegio, universidad, hospital o vivienda 🏡 .

Figura 1. Representación de un sistema de abastecimiento de agua potable

¿Qué son las redes de distribución de agua potable?

Aquí te contamos cuál es ese secreto que se esconde bajo nuestros pies. Para poder llevar el agua potable desde las plantas de potabilización hasta nuestros grifos 🚰, necesitamos las redes de distribución. Estas son el conjunto de tuberías, válvulas, hidrantes, sistemas de bombeo, tanques. La mayor parte de las redes está enterrada y sus componentes más visibles son los tanques, hidrantes, y estaciones de bombeo (ver Figura 2).

Fotos de un tanque, hidrante y estación de bombeo
Figura 2. Tanque, hidrante y estación de bombeo

Las redes de distribución son la parte del sistema de abastecimiento más extensa porque debe cubrir la mayor área posible para llegar a todos los usuarios 👥. También es una barrera física que protege al agua potable de una recontaminación. Esta gran extensión también influye en la presencia de diversos procesos físicos, químicos y biológicos que están interrelacionados.

Clasificación de las redes de distribución

Según su tamaño, las redes pueden ser primarias o secundarias. La red primaria la conforman las tuberías que transportan las mayores cantidades de agua desde la salida de las plantas de potabilización. En consecuencia, sus diámetros son notoriamente mayores a las tuberías de la red secundaria. Generalmente no hay usuarios conectados en la red primaria y sus materiales deben ser resistentes porque van por debajo de las vías principales con alto tráfico.

La red secundaria transporta el agua desde la red primaria hasta los usuarios. Por esta razón, la red secundaria va por debajo de calles de menor tráfico y en las calles de los barrios o vecindarios 🏘️. Por lo tanto, sus diámetros son notoriamente menores que los de las tuberías de la red primaria. Para la red secundaria, se usan materiales como el plástico, aunque las redes viejas todavía se encuentran tuberías de hierro fundido y asbesto cemento. Estos materiales deben ser reemplazados cuanto antes debido a los riesgos laborales que el asbesto representa para las personas que están en contacto con éste.

La profundidad a la cual deben estar enterradas las tuberías depende del tipo de vía en el que se encuentran las redes primarias y secundarias, dadas las cargas externas a las que van a estar sometidas. Las redes de agua siempre deben estar encima del alcantarillado para evitar que una fuga de éste 💩 nunca alcance las tuberías de agua potable. Esta es una forma de prevenir su contaminación.

Existen tres tipos principales de redes de distribución de agua potable según su configuración: red mallada, red ramificada y red sectorizada (ver Figura 3). La red mallada permite continuar con el servicio a una gran cantidad de usuarios cuando se deba realizar una actividad de mantenimiento 🚧. Por ejemplo, un daño que debe ser reparado o reposición de tuberías y válvulas viejas por unas nuevas. La red ramificada no es tan flexible como la red mallada ya que cada área se abastece de un ramal de tuberías. Cualquier afectación de las tuberías de dicho ramal puede impactar el suministro de agua a cierta cantidad de usuarios, dependiendo del punto en el que ocurre el problema. Esto puede ocasionar que no haya forma de abastecer a los usuarios por otra conexión con la red.

Equemas de las redes mallada, ramificada y sectorizada. ERP: Estación Reguladora de Presión
Figura 3. Equemas de las redes mallada, ramificada y sectorizada. ERP: Estación Reguladora de Presión

En el caso de las redes sectorizadas, ocurre una situación intermedia a las descritas anteriormente. Estas son menos flexibles que las redes malladas porque una posible afectación de la tubería que alimenta uno o varios sectores hidráulicos puede cortar el suministro del agua potable a muchos usuarios. Sin embargo, al ser estas tuberías alimentadoras de mayor diámetro y estar ubicadas en vías principales, sus materiales pueden ser más resistentes para soportar las fuerzas internas y externas. Si dicha afectación ocurre al interior de los sectores hidráulicos, estos están configurados como pequeñas mallas cerradas y se conserva cierta redundancia en la red para que el área afectada sea la menor posible. Esto depende de la ubicación de válvulas que permitan aislar el circuito afectado y el resto del sector continúe con la provisión del servicio de agua potable mientras se realiza la labor de mantenimiento.

En conclusión, las redes de distribución son un sistema grande y complejo 😬. Las redes son fundamentales para que, al abrir el grifo, puedas contar con agua potable segura 🥰. Esperamos que, la próxima vez que veas a un  hidrante, un tanque o a una estación de bombeo en tu ciudad o pueblo, puedas imaginarte todo ese mundo oculto bajo nuestros pies.

En las próximas publicaciones te contaremos más detalles sobre la operación, mantenimiento y aspectos de calidad de agua en las redes de distribución.

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Comments (2)

  1. Pingback: ¿Qué le da sabor al agua potable? - Cognita Links SAS

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